Vivenciando la Euritmia


La Escuela Waldorf “Crisol de Micael” ha tenido una
experiencia muy linda con la visita de Stefanie Frank (madrina de una alumna de
la primaria), ex alumna y madre Waldorf, actualmente maestra de Euritmia en
Hamburgo (Alemania). Ella regaló a cada grado de la Escuela su primera
experiencia con la Euritmia. La actividad culminó con una muy bella
representación para todos los alumnos.



Con la Euritmia se agrega algo muy importante al camino
educativo: La experiencia de vivir el grupo y el movimiento conciente del
cuerpo, ejercer la voluntad y la entrega social al mismo tiempo.

Durante dos semanas y media los niños han podido
vivenciar por primera vez una breve introducción a esta asignatura, únicamente
aplicada en Escuelas Waldorf. Si bien los alumnos normalmente no la consideran
como muy divertida…. ahí estaban, todos nuestros niños, haciendo un
considerable esfuerzo en integrar algo nuevo en su registro corporal, sentirse
parte de un todo y sentir el todo!


Rudolf Steiner recomendaba la práctica de Euritmia dos
veces por semana y la consideraba una gran ayuda para perder el miedo al
escenario y para fortalecer la voluntad artística.



Stefanie Frank es un ejemplo vivo de este tipo de
iniciativa que surge con naturalidad y gracia, atenta hacia los gestos
pequeños, generosa y flexible y con el entusiasmo de la maestra experimentada
de verdadera vocación.


ENTREVISTA

“Stefanie, ¿has observado diferencias entre los niños de
la Escuela Crisol de Micael,con tus alumnos en las Escuelas Waldorf en
Alemania?”

“No, para nada, los niños en todo el mundo son
niños…algunos son tranquilos, otros mas movedizos, inquietos… son niños!”

“Como maestra Waldorf experimentada, podrías darnos unos
consejos acerca de la pedagogía aplicada en nuestra escuela?”

“Valoro mucho el esfuerzo que hace cada maestro. El mismo
se ve reflejado en los alumnos, en el ambiente en el aula, cuando se respira el
contagioso espíritu de querer hacer algo en conjunto, inspirar a sus alumnos a
sentir eso, es el verdadero arte de educar.

También sentí una falta de espacio físico, mucha
concentración al aula, falta de actividades como huerta, cerámica, cocina,
carpintería.”

“¿Podrías imaginarte volver y como ves el futuro de la
Escuela “Crisol de Micael”?

“Esta visita me gusto mucho, me gusta el trabajo en
Escuelas pequeñas que necesitan mucha fuerza para construir todavía. Si la
escuela quisiera, me podría imaginar una experiencia mas larga, de 2 años por
ejemplo.

Creo que la comunidad escolar no debe asustarse del
crecimiento, al contrario, debe sentir que con el desafío crecen también las
fuerzas que ayudan! Todas las Escuelas Waldorf crecen desde abajo hacia arriba
y esto comprende 12 años de Escuela! Veo todo el potencial y la capacidad en
esta comunidad para seguir creciendo. Hay muchos padres estudiando la
pedagogía, que es una gran suerte y ayuda. Una Escuela vive gracias a todos sus
integrantes, dejarla crecer para arriba la va fortalecer en todos sus niveles.
La inversión de confianza y voluntad de todos los padres y alumnos que quieren
que así sea, va a construir un verdadero organismo social vivo y duradero en el
tiempo. El espíritu de algo tan importante como el crecimiento nuestro y de
nuestros hijos no se debe abandonar en 6to o 7to grado… se merece todo el
camino completo con gran fiesta final!”

Aquí entre carcajadas se termina nuestra conversación, de
momento, porque queda mucho por hablar todavía. Nos veremos Stefanie!
Muchísimas gracias por tu entrega y tenerte de visita ha sido un gran placer!
Ojala que vuelvas!

Magdalena Rotta